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Alabado sea el Señor Parte 5

¡Alabado sea el Señor! y dar la bienvenida al Programa de Radio Dios de  Maravillas. Únase a nosotros para la segunda parte en el mensaje titulado: "Mas buscad primeramente el reino de Dios." Vamos a examinar, lo que significa poner a Dios por encima de todas las cosas en nuestras vidas y todas las bendiciones que siguen cuando lo hacemos.

Cuando nos encontramos en deuda, Dios sabe que estamos en deuda. Y nosotros no tenemos que trabajar 2, 3 ó 4 puestos de trabajo para pagar la deuda. Lo único que es fácil, buscad primeramente el reino de Dios. La "primer" palabra es más importante. No es buscad el reino de Dios, ha buscad "En primer lugar" el reino de Dios. Esto significa que ponemos a Dios en primer lugar, en todo lo que hacemos, Él se convierte verdaderamente en el Señor de nuestras vidas. No sólo decimos Señor Jesús, me bendice este día. Cuando decimos Señor, Él es realmente el Señor de nuestras vidas? Es él realmente la prioridad en nuestras vidas? Entonces, eso es lo que vamos a ver.

Marcos capítulo 6 versículos 30 a 44.
 30 Los apóstoles se reunieron con Jesús y le contaron lo que habían hecho y enseñado.
   31 Y como no tenían tiempo ni para comer, pues era tanta la gente que iba y venía, Jesús les dijo:
   —Vengan conmigo ustedes solos a un lugar tranquilo y descansen un poco.
   32 Así que se fueron solos en la barca a un lugar solitario. 33 Pero muchos que los vieron salir los reconocieron y, desde todos los poblados, corrieron por tierra hasta allá y llegaron antes que ellos.34 Cuando Jesús desembarcó y vio tanta gente, tuvo compasión de ellos, porque eran como ovejas sin pastor. Así que comenzó a enseñarles muchas cosas.
   35 Cuando ya se hizo tarde, se le acercaron sus discípulos y le dijeron:
   —Éste es un lugar apartado y ya es muy tarde. 36 Despide a la gente, para que vayan a los campos y pueblos cercanos y se compren algo de comer.
   37 —Denles ustedes mismos de comer —contestó Jesús.
   —¡Eso costaría casi un año de trabajo![b] —objetaron—. ¿Quieres que vayamos y gastemos todo ese dinero en pan para darles de comer?
   38 —¿Cuántos panes tienen ustedes? —preguntó—. Vayan a ver.
   Después de averiguarlo, le dijeron:
   —Cinco, y dos pescados.
   39 Entonces les mandó que hicieran que la gente se sentara por grupos sobre la hierba verde. 40Así que ellos se acomodaron en grupos de cien y de cincuenta. 41 Jesús tomó los cinco panes y los dos pescados y, mirando al cielo, los bendijo. Luego partió los panes y se los dio a los discípulos para que se los repartieran a la gente. También repartió los dos pescados entre todos. 42 Comieron todos hasta quedar satisfechos, 43 y los discípulos recogieron doce canastas llenas de pedazos de pan y de pescado. 44 Los que comieron fueron cinco mil.
Ves a la gente de aquí, ¿cómo las personas que vinieron en busca de él y sentía que no tenía tiempo ni para comer y vinieron a Jesús. Cuando nos fijamos en el versículo 34, dice: "Y Jesús, después que salió, vio una gran multitud, y tuvo compasión de ellos, porque eran como ovejas que no tienen pastor, y se puso a enseñarles muchas cosas".

Así que si nos fijamos en esto, vemos la prioridad de nuevo. Jesús sabía. ¿Creemos que Jesús sabe?
Él sabe, Jesús sabe que no había comido, no tenían tiempo para comer, todos vinieron de allá. Mira la prioridad de Dios, Él está alimentando el alma en primer lugar, antes de alimentar a su cuerpo. Por lo tanto, es muy importante porque si usted ve que el verso en Mateo capítulo 6, Él dice que "no es la vida más importante?". Tu alma es más importante y la gente es más importante que la casa en la que vivimos. De la misma forma, nuestra alma es más importante que nuestro cuerpo y nuestro cuerpo es más importante que la ropa. ¿Necesitamos ropa? Sí. ¿Tenemos que estar sano? Sí. ¿Es necesario para ser feliz? Sí. Pero, ¿qué es lo más importante, cuando nos hacemos la pregunta, que es nuestra alma?. Debido a que nuestra alma va a vivir para siempre. Así que aquí, a pesar de que Jesús sabía que llegaron allí sin comida, tenían hambre. ¿Qué está haciendo Dios? Él se sintió mucha compasión hacia las personas, y sus almas, y Él está primero. Cumpliendo con su necesidad espiritual.  Estas personas, tienen hambre, a pesar de ser físicamente hambriento, están espiritualmente hambrientos, pero están superando su hambre y vienen después de que Jesús y Él les está enseñando. Él tuvo compasión, porque eran como ovejas que no tienen pastor y comenzó a enseñarles muchas cosas. Por lo tanto, no vemos como el multiplico los cinco panes y los dos peces por aquí. El primero se les enseña con compasión, él les está enseñando cómo alimentar su alma. Y después de eso, él no dijo "está bien, vete a casa, estoy aquí sólo para alimentar su alma, todo el mundo se levante y vuelve a su casa." No, el no dijo eso. Él es un Dios que no sólo satisface nuestra necesidad espiritual, sino que también se preocupa por nuestras necesidades físicas. Así pues, nuestro Dios, que sabe lo que necesitamos en nuestra alma, Él sabe lo que necesitamos en nuestros cuerpos también. Él sabe que tenemos hambre, Él sabe que estamos cansados, Él sabe que está enfermo, él sabe que está deprimido, él sabe todas esas cosas. Entonces, sabiendo Jesús que a pesar de que los discípulos se acercaron y le dijo: "Señor despedirlos," Él está diciendo: "dadles vosotros de comer." Eso demuestra la compasión de Jesús diciendo que necesitan algo para comer y darle y él sabían que van a traer algo, y él va a realizar ese milagro, pero ese milagro no sólo muestra el poder de Dios, pero demuestra lo mucho que se preocupa por nuestras necesidades y también muestra que cuando buscamos Su reino en primer lugar, cómo Él proveerá. El pueblo no dijo: "Señor, terminamos escuchando su palabra, por favor, ¿nos puede dar algo de comer?" La gente no le pregunté eso. Sin ellos, preguntando, buscando a Dios, Él agregó, les dio comida como premio para ellos. Estaban todos sentados en el versículo 42, vemos "Y todos comieron y se saciaron". No era que le dio porciones Pequeña allí.  Como vemos que cuando la gente se quede sin comida, tratan de dividir y compartir, y  no todo el mundo está lleno, pero por aquí a pesar de que había cinco mil hombres, eso significa que hay mujeres mucho más y mucho más hijos, de tantas personas que comieron , cuando terminaron de pasar las cestas  sobraron 12 cestas de peces y pan. Y Dios es tan bueno. Él es un Dios de la abundancia, por eso leemos en Filipenses que Él suple todas nuestras necesidades conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús. Dios cuenta bancaria no está vacío. Canasta de Dios no está vacía. El almacén de Dios no está vacío. Siempre está lleno. Así que Él nos va a alimentar y satisfacer nuestras necesidades según Sus riquezas. Siempre se va a desbordar. Él nunca nos va a dar algo que no nos va a llenar, como la mitad de para comer o nos alimentó a medio o nos pagan la mitad y la otra mitad no sabemos qué hacer. Nunca hace eso. Cuando Dios provee, siempre desborda. Por lo tanto, se trata de un pasaje en el que vemos que cuando lo buscamos, en primer lugar, más que la comida, más que nuestro dolor físico y el cansancio, cuando superemos eso, y buscamos de Jesús - Él está seguro de satisfacer nuestra necesidad y refréscanos. El alimenta nuestra alma y nuestro cuerpo. Así que Dios es un Dios maravilloso.

La segunda cosa que quiero decir es II Reyes Capítulo 4, 8 y 17
 4 Luego entra en la casa con tus hijos y cierra la puerta. Echa aceite en todas las vasijas y, a medida que las llenes, ponlas aparte.
   5 En seguida la mujer dejó a Eliseo y se fue. Luego se encerró con sus hijos y empezó a llenar las vasijas que ellos le pasaban. 6 Cuando ya todas estuvieron llenas, ella le pidió a uno de sus hijos que le pasara otra más, y él respondió: «Ya no hay.» En ese momento se acabó el aceite.
  7 La mujer fue y se lo contó al hombre de Dios, quien le mandó: «Ahora ve a vender el aceite, y paga tus deudas. Con el dinero que te sobre, podrán vivir tú y tus hijos.»
    8 Un día, cuando Eliseo pasaba por Sunén, cierta mujer de buena posición le insistió que comiera en su casa. Desde entonces, siempre que pasaba por ese pueblo, comía allí. 9 La mujer le dijo a su esposo: «Mira, yo estoy segura de que este hombre que siempre nos visita es un *santo hombre de Dios. 10 Hagámosle un cuarto en la azotea, y pongámosle allí una cama, una mesa con una silla, y una lámpara. De ese modo, cuando nos visite, tendrá un lugar donde quedarse.»
   11 En cierta ocasión Eliseo llegó, fue a su cuarto y se acostó. 12 Luego le dijo a su criado Guiezi:
   —Llama a la señora.[b]
   El criado así lo hizo, y ella se presentó. 13 Entonces Eliseo le dijo a Guiezi:
   —Dile a la señora: “¡Te has tomado muchas molestias por nosotros! ¿Qué puedo hacer por ti? ¿Quieres que le hable al rey o al jefe del ejército en tu favor?”
 Pero ella le respondió:
   —Yo vivo segura en medio de mi pueblo.
   14 Eliseo le preguntó a Guiezi:
   —¿Qué puedo hacer por ella?
   —Bueno —contestó el siervo— ella no tiene hijos, y su esposo ya es anciano.
   15 —Llámala —ordenó Eliseo.
   Guiezi la llamó, y ella se detuvo en la puerta. 16 Entonces Eliseo le prometió:
   —El año que viene, por esta fecha, estarás abrazando a un hijo.
   —¡No, mi señor, hombre de Dios! —exclamó ella—. No engañe usted a su servidora.
   17 En efecto, la mujer quedó embarazada. Y al año siguiente, por esa misma fecha, dio a luz un hijo, tal como Eliseo se lo había dicho.
Vemos en este pasaje cómo esta mujer está preparado todo, para el hombre de Dios. Una manera de servir a Dios, es servir al pueblo de Dios. Y lo que ella está haciendo aquí, dando a nadie le dijo que lo hiciera y ella no se lo esperaba una bendición de Dios. Vemos en este pasaje cómo esta mujer preparado todo, para el hombre de Dios. Una manera de servir a Dios, es servir al pueblo de Dios. ¿Y qué está haciendo aquí? ella está dando, nadie le dijo que lo haga. Ella no lo hizo, esperando una bendición de Dios. Ella está haciendo, porque ella quería hacer. No esperaba nada, al igual que la gente que vimos que vinieron, vinieron a ver a Jesús. No vinieron esperar algo, Él nos dará pan para comer. Si vemos esta mujer, ella le está diciendo a su marido, "tenemos que hacer, tenemos que hacer una pequeña habitación con una mesa y con velas. Tenemos que hacer lo suficientemente cómodo para él, porque, sabemos que él es hombre de Dios." No ser egoísta, ella realmente hizo esas cosas para el hombre de Dios. ¿Sabes lo que el Señor hizo por aquí?, Dios está usando al hombre de Dios que la bendiga. Como leemos en Filipenses, gente, realmente bendecido Pabló. A su vez Dios usó a Pablo para bendecir a las personas, dijo según Sus riquezas en gloria de Cristo Jesús, Dios proveerá a todas vuestras necesidades. Así, cuando vemos esta señora, ella está bendiciendo el hombre de Dios, porque ella tenía sus prioridades correctas, su valor fue alto. Ella no dijo "está bien Yo no quiero hacer esta habitación, este es trabajo para mí, tengo que gastar dinero en esto para hacer la mesa y poner la vela, ella no pensaba en eso. Su prioridad no era yo, quiero hacer el hombre de Dios cómoda, es decir, quiero honrar al Señor. Así que cuando ella hizo eso, lo que el Señor hizo fue, que Dios se dio cuenta, y Dios habla por medio de - obra a través de personas, de una manera. Y lo que el Señor hizo, Él realmente poner eso en su corazón para saber lo que esta mujer necesitaba. Ella no tenía un hijo, pero ella no quería decirlo porque ella no tenía ninguna esperanza. Así Elija, llamó a su siervo porque él habló con esta mujer y no obtuvo ninguna respuesta. Ella está diciendo estoy llena, estoy bien, no te molestes, estoy feliz, siempre y cuando usted está bendecido. Eso es lo que ella está diciendo. Pero debido a que el Señor puso en el corazón de Elías, Dios quiso bendecir a esta mujer. Debido a que Elías, no puede hacer nada sin el Señor y Dios puso esto en el corazón de Elías para ver lo que ella necesitaba. Su sirviente está diciendo que: "Maestro, ella no tiene un hijo, ella no tiene hijos." Y Dios está cumpliendo, su necesidad más importante, la necesidad física y emocional. Sabemos cuántas veces que las personas que no tienen hijos lloran, ellos dicen: "Señor, no tengo a un niño" y se sienten solos. Por aquí, leemos claramente, que su marido era viejo, eso significa que ella era vieja también. Todas sus esperanzas se habían ido, así que cuando Elías le dijo que Dios te va a dar un hijo, ella le dijo, no me mientes. Me Vas a romper mi corazón. Ella ya está rota, está diciendo: "Yo no quiero estar roto nada más, prefiero vivir con esto. Que pensar que voy a tener un hijo y luego no tener un ningún hijo. “Para esa persona lo que el Señor hizo, ella no iba buscando algo. Ella no dijo "está bien vamos a darle a este hombre de Dios, para que él pueda darme un hijo." No. Eso no era su motivo, su motivo era honrar al Señor, ella puso a Dios primero. Ella puso a Dios por encima de su necesidad. lo que Dios hizo fue Conoció a sus necesidades y su necesidad no era una necesidad común. No es algo que se podría haber hecho por ningún ser humano. Dios lo hizo. Así que cuando vemos, lo que hizo con los cinco panes y dos peces. Un milagro que no se puede hacer humanamente, Jesús lo hará cuando buscamos su reino primero. Y Él nos da el desbordamiento lleno, así lo mismo con ella. No se puede comparar la cama, el candelabro, y la preparación de la sala, con el niño que ella consiguió del Señor. Así que cualquier cosa que hagamos para el Señor, Dios nos devuelve ciento por uno. Cuando ponemos al Señor primero, le buscan y Su reino en primer lugar, el tiempo que le damos al Señor en nuestra oración personal. El tiempo que le damos al Señor en ayuno, el tiempo que le damos al Señor en busca del Señor, en el dar, el tiempo que le damos al Señor en el servicio del Reino de Dios, y el pueblo de Dios, todo lo que hacemos para el Señor nunca vendrá de nuevo a nosotros de la misma forma. Nunca se ven recompensados ​​por igual. Siempre serán mayores, así es como Dios lo hace porque Dios no es deudor de nadie.

Nuestro Padre Celestial el Compasivo, el satisfacer las necesidades de a todos los oyentes y fortalecer sus almas para que puedan disfrutar de su presencia viva, en el nombre de Jesús, te damos gracias precioso Señor! Amén.
Que Dios los bendiga! Por favor, únase a nosotros para la próxima vez para la tercera parte, Buscad primero el reino de Dios.